
En los últimos años, los drones han pasado de ser simples herramientas recreativas a convertirse en dispositivos clave en sectores tan diversos como la agricultura, la seguridad, el periodismo y la gestión ambiental. Esta expansión global, sin embargo, no viene sin tensiones: la misma tecnología que facilita la entrega de medicinas en zonas remotas puede también utilizarse para vigilar protestas, controlar territorios o profundizar desigualdades sociales. Conscientes de estos dilemas, desde TEDIC presentamos la investigación “Drones: regulación y uso en Paraguay desde una perspectiva de derechos digitales”, elaborada por Antonia Bogado y Hugo Mendieta, con la coordinación de Maricarmen Sequera.
El estudio expone cómo, en Paraguay, la regulación sobre drones permanece fragmentada y débil frente a los desafíos que implica su uso creciente. A través de solicitudes de acceso a la información, entrevistas y revisión documental, las y los investigadores revelan vacíos normativos, falta de transparencia en las adquisiciones públicas y riesgos concretos para derechos fundamentales como la privacidad, la libertad de expresión y el derecho a la protesta.
A nivel regional y global, la investigación muestra patrones preocupantes: el despliegue de drones en conflictos armados, su uso para vigilancia masiva en ciudades latinoamericanas y la incorporación de tecnologías biométricas que refuerzan sesgos discriminatorios. Estas experiencias internacionales sirven como advertencia para Paraguay, donde la ausencia de controles podría abrir la puerta a prácticas similares.
Los hallazgos señalan que los drones son tecnologías duales: pueden ser aliados en el monitoreo ambiental, la agricultura de precisión o la asistencia humanitaria, pero también convertirse en instrumentos de control social y militarización del espacio civil. La clave está en definir marcos regulatorios claros, transparentes y centrados en derechos humanos que permitan aprovechar sus beneficios sin sacrificar libertades.
Las conclusiones del informe son claras, urge abrir un debate público sobre el uso de drones en Paraguay, establecer mecanismos de supervisión independiente y adoptar una ley robusta de protección de datos personales. Solo así podremos garantizar que estas tecnologías emergentes se utilicen en favor del bien común y no como nuevas formas de vigilancia o represión.
Investigación: Antonia Bogado y Hugo Mendieta.